Cuarto de Reflexiones

A menudo cuando nos referimos al cuarto de reflexiones, o bien, a la cámara de reflexiones, nos enfocamos en la simbología del lugar, en los elementos que se encuentran en ese recinto, en la forma de acceder y en lo que se efectúa en ese cuarto. De esta manera centramos el significado en los elementos individuales.

Sí, efectivamente se baja allí. Sí, está obscura, hay un número determinado de velas y elementos varios alegóricos. Se encuentran el vitriol; que es un compuesto químico (H2SO4) que interviene en el proceso de obtención del oro al igual que el azufre, el carbón y el mercurio; al mismo tiempo es el acrónimo de la primera parte de una frase; letreros con leyendas específicas; alegorías fúnebres y elementos representativos;  además de un documento preciso que nos exige o invita a requisarlo. Sin embargo ¿Cuál es el sentido de todo esto?

Si efectuamos la pregunta ¿Cuántas veces se ha bajado a ese cuarto? Probablemente contestaríamos que solamente una vez antes de determinado evento. Sin embargo, hemos bajado una cantidad considerable a ese cuarto; tal vez no de manera consciente, sin duda de una manera descuidada. Se nos ha arrebatado, se nos ha lanzado ahí en tantas ocasiones para repasar los deberes elementales de cada uno y, sin embargo, al parecer sólo recordamos aquella vez en la que descendimos físicamente; y no es que las otras veces fueran menos reales, al contrario.

Simbólicamente se nos introdujo en ese cuarto, pero realmente hemos llegado ahí en varias ocasiones, y a veces hemos logrado comprender los tres principios que nos debemos a nosotros, a los demás y a aquello que llamamos divino, además damos cuenta de nuestro legado ¿Cuándo?

Reflexión se asocia con la manifestación de pensamiento con propósito; también implica la devolución de algo en el mismo ángulo de incidencia, por ejemplo: Un rayo de luz sobre una superficie reflectante; así como una bola de billar siguiendo un patrón geométrico recluido en un espacio rectangular. Estrictamente podemos decir que la palabra se refiere a la acción de doblar hacia atrás, desviar hacia atrás, hacia la fuente de donde procede.

¿En cuantas ocasiones de la vida cotidiana nos hemos encontrado en este tipo de situación? En este tipo de situaciones que nos obligan a considerar la propia vida o identidad de otra forma, efectuando un cambio determinante en nuestra persona. Cambio por cierto motivado por el impulso insensato que culmina en un punto de no retorno, al cual algunos llaman desgracia.

Es el sentimiento de lo irreparable; lo incontestable, lo angustioso de las consecuencias de nuestros propios actos para con nosotros y los demás; el fuerte brazo que nos obliga a descender, que nos reclama que el tiempo no se ha detenido, que necesitamos resolver, resolver en virtud o arriesgarse una vez más a la caída; caída que habrá de sucederse una y otra vez, hasta encontrar y dar cuenta verdadera de lo importante.

Narrativamente todo el conjunto es una alegoría. Específicamente nos muestra nuestro estado antes de descender y el estado al cual se aspira si logramos entender y asimilar, por lo menos, los deberes propios, que están en concordancia con la propia naturaleza de la mente y de los actos necesarios para el ideal de vida que se pretende.

Cada elemento de ese cuarto tiene efectivamente una traducción simbólica que en conjunto nos advierte, de la manera más amable, cuál es el estado de imperfección y lo que reina ahí. Es, sin duda, el punto de partida para iniciar el trabajo, real, simbólico y ritual. Pues la interacción con los elementos del cuarto es limitada, sólo se nos expuso a ellos, se nos mostraron; pero de ninguna manera fueron usados en el procedimiento concreto. Su uso, la frecuencia del mismo, así como la habilidad de su implementación depende ya, exclusivamente, de cada quien, en los aspectos de vida o personalidad que se elijan.

¿Tienes cuenta de las veces que has bajado? ¿Cuántas veces has re-visitado por la misma circunstancia? ¿Qué aprendiste al bajar? ¿Cómo es que entraste? ¿En qué estado saliste? ¿Qué significado tiene el bajar de manera simbólica? ¿Qué relación puede tener este cuarto de reflexiones con Los Pasos Perdidos (la novela y el lugar)?

Write a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *